Reseña a Inés Garland - "Una reina perfecta"

Una reina perfecta es un cuento de Inés Garland incluido en su libro homónimo, publicado por primera vez en 2008. Esta obra comprende 13 relatos que contienen temas como la percepción del mundo infantil, la complejidad de las relaciones familiares, la pérdida de la inocencia, la angustia, el duelo, la búsqueda permanente de amor.

Nacida en Buenos Aires en 1960, Garland es una escritora, traductora y periodista argentina. En 2014 se convirtió en la primera autora latinoamericana en obtener el Premio Alemán de Literatura Juvenil por su primera novela infantil Piedra, papel o Tijera (2009), mientras que en 2023 obtuvo el Strega Ragazze e Ragazzi, máximo premio a la literatura infantil de Italia, por Lilo (2019)​. Es considerada una de las traductoras argentinas contemporáneas más destacadas, habiendo traducido a las escritoras Lorrie Moore, Lydia Davis, Sharon Olds y Mavis Gallant. Su obra ha sido traducida a los idiomas alemán, francés, holandés e italiano, entre otros.

El relato Una reina perfecta se centra en una madre que se esfuerza por mantener una apariencia de perfección y control en su vida y en la de su hija. A medida que avanza la trama, descubrimos las tensiones ocultas y las verdades no dichas en la familia que afectan la interacción entre los personajes, revelando capas de conflicto y vulnerabilidad.

La narradora de este cuento es una niña que nos guía a través de sus observaciones y emociones en el transcurso de una noche particular. A través de sus ojos, descubrimos un mundo de tensiones y deseos reprimidos. La niña muestra una profunda soledad y una fuerte necesidad de afecto y atención, reflejada en su anhelo de probar la mousse de chocolate destinada a la cena de sus padres —en la cual ninguna de las niñas puede participar— y en sus fantasías de vivir en un mundo diminuto donde podría estar más cerca de sus padres. A pesar de su corta edad, su mirada es aguda y revela una percepción temprana de la complicada vinculación en su familia.

La relación entre los padres de la niña está marcada por una notable frialdad y distancia. La madre es una figura autoritaria y distante, cuyos "no" son descritos como "piedras enormes y negras", y cuya apariencia y comportamiento están siempre impecables pero carecen de calidez emocional. Se convierte en un símbolo de expectativas inalcanzables y de una realidad que la niña lucha por comprender y aceptar. El padre, por otro lado, se presenta como una figura más accesible pero también distante, atrapado en sus propias preocupaciones y aparentemente desinteresado en la dinámica diaria. La madre parece guardar un rencor constante hacia el padre, manifestado en reproches sobre su tardanza y en una actitud de constante desaprobación.

Un aspecto crucial del relato es el amorío secreto del padre con una de las invitadas de la cena. La niña escucha voces en el pasillo y percibe el tono íntimo y el perfume que queda en el aire después de que alguien se oculta en su cuarto. La tensión sexual y el secreto quedan implícitos en las interacciones entre el padre y la invitada, y en la forma en que la madre, aunque consciente de alguna manera, maneja la situación con un sentido de amarga resignación. Esta situación subraya la fractura en el matrimonio y añade una capa de tristeza y complicidad no deseada en la percepción infantil de la narradora.

La narrativa nos invita a reflexionar sobre las máscaras que las personas a menudo usan para ocultar sus inseguridades y los costos emocionales de mantener una fachada de perfección. El relato pinta un cuadro vívido de una familia disfuncional, donde las apariencias y las tensiones no resueltas se entrelazan en el ambiente cotidiano. La casa, con sus habitaciones bien decoradas y sus objetos de lujo, contrasta con el vacío emocional que siente la protagonista. La mousse de chocolate, que la niña desea pero nunca puede comer, simboliza el deseo insatisfecho y la constante negación de pequeños placeres y afectos en su vida.

Es un relato emotivo y perspicaz que revela la habilidad de Inés Garland para capturar las complejidades de la vida familiar y la psicología infantil. La autora aborda temas universales con sensibilidad, invitando al lector a reflexionar. “Tengo cuentos que fueron hitos en el descubrir lo que yo podía llegar a escribir. Una reina perfecta es un hito en mi escritura que lo junto con el Rayo verde que es otro cuento mío. Es como que dijera que escribí Rayo verde porque escribí Una reina perfecta, un cuento que me hizo tomar contacto con una forma de tratar el tiempo que después aparece mucho en mi escritura", indicó Garland en una entrevista virtual para El Fénix Digital en 2021 (1).