Consigna epistolar: Descripción de personaje
María Antonieta fue la última reina consorte de Francia antes de la Revolución Francesa. Se casó con Luis XVI de Francia en 1770 a la edad de 14 años como parte de una alianza política entre Austria, su país de origen, y Francia. Se convirtió en una figura muy controvertida durante su reinado debido a su estilo de vida lujoso y su aparente indiferencia hacia los problemas de la gente común. Fue criticada por su gasto extravagante en moda y entretenimiento, lo que le valió el apodo de "Madame Déficit". Su estilo de vida y su relación con la realeza extranjera alimentaron el descontento popular y contribuyeron al crecimiento del descontento social en Francia. Durante la Revolución Francesa, María Antonieta fue objeto de un intenso escrutinio público y se convirtió en un símbolo de desprecio del pueblo hacia la monarquía. Fue acusada de conspirar contra la Revolución y de actuar en contra de los intereses del pueblo francés. En octubre de 1793, fue condenada a muerte por un tribunal revolucionario. El día de su ejecución, fue trasladada a la Place de la Révolution en París, donde fue guillotinada ante una multitud. El retrato realizado por Pablo Bernasconi presenta un maniquí femenino con un vestido integrado por la cabeza y la cola de un pescado. El pescado, además de gotear lo que aparenta ser sangre, está pintado con los colores y el diseño de la bandera francesa. Haciendo una serie de investigaciones, descubrí que en la culinaria francesa de la monarquía los pescados y mariscos eran ingredientes de lujo que se utilizaban en banquetes y cenas formales para impresionar a los invitados y mostrar el poderío y la riqueza. María Antonieta no es conocida específicamente por tener una relación directa con los peces, pero durante su tiempo como reina de Francia, se dice que estaba interesada en la moda, el entretenimiento y el lujo, y era conocida por su participación en elaboradas fiestas y eventos sociales. Asimismo, la relación puede provenir de una interpretación simbólica o satírica de María como una figura desconectada de la realidad y frívola, como si estuviera nadando en un mundo de lujo y placer mientras el pueblo sufría. Por otro lado, al maniquí que hace alusión a la reina le falta la cabeza. Cómo ya mencioné, luego de ser declarada culpable de traición, María fue decapitada.
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