Comentario sobre Pulp Fiction - Hemingway

"Tiempos Violentos" es una obra dirigida por Quentin Tarantino que se sumerge en las complejidades morales y las tensiones emocionales de sus personajes a partir de una serie de secuencias desordenadas cronológicamente. Uno de los arcos centrales es el de Butch Coolidge, un boxeador interpretado por Bruce Willis. Si relacionamos su historia con el cuento "Los asesinos" de Hemingway, encontramos similitudes notables.

En "Los asesinos" conocemos a Ole Andreson, un ex boxeador que se encuentra atrapado en una situación particular que no es revelada del todo, pero que enseña que el sueco está acechado por la sombra de una decisión pasada y la violencia inminente. De manera similar, Butch Coolidge encarna una lucha interna. Como boxeador, Butch está acostumbrado a enfrentarse a sus oponentes en el ring, pero cuando su vida se convierte en un juego mortal con el peligroso gángster Marsellus Wallace, sus habilidades de combate son puestas a prueba en un escenario más complicado. También se hace hincapié en la figura del padre de Butch, quien a pesar de no haberlo conocido, representa un símbolo de honor y lucha al cual se aferra hasta último minuto, haciéndolo enfrentar una serie de riesgos.

Al igual que Ole en el cuento, Butch se ve obligado a enfrentar las consecuencias de sus acciones. Su decisión de desafiar las órdenes de Marsellus lo coloca en una posición peligrosa, pero también lo lleva a un camino de redención. La tensión crece a medida que Butch se mueve a través de un paisaje lleno de peligros, mientras lucha por su vida y su libertad. Tarantino emplea elementos visuales para intensificar la sensación de urgencia e intriga que impregna la historia. Desde la escena del taxi de Butch luego de la pelea de la cual nos vamos enterando mediante la radio, hasta el enfrentamiento con Marsellus en el callejón, y particularmente el momento en el que se libra de los secuestradores y ayuda al gángster a escapar también a pesar de su interna, se aprecia una energía palpable.

En última instancia, tanto "Tiempos Violentos" como "Los asesinos" exploran temas universales de destino, redención y el precio de la violencia. A través de la narrativa del cine de Tarantino y la prosa de Hemingway, somos testigos de la complejidad de la inevitabilidad de enfrentar nuestras decisiones, incluso cuando el resultado parece estar predeterminado.